Todos los extremos ambientales, tanto el calor como el frío, afectan a la piel. Las bajas temperaturas del invierno producen deshidratación en las zonas más sensibles que quedan expuestas, este es el caso de los labios. El viento, la lluvia y los cambios bruscos de temperatura con las calefacciones, hacen que la lubricación natural de los labios se vaya perdiendo de forma gradual.
Todas hemos tenido durante esta época del año los labios escamados, los notamos tirantes e incluso se nos han hecho grietas en alguna ocasión. Al maquillarnos notamos que las pielecitas muertas no nos permiten tener los resultados que esperamos con nuestro pintalabios.
Pero hay varias maneras de protegerlos y prevenir la aparición de estos molestos síntomas. Es importante empezar a utilizar los productos cosméticos preventivos mucho antes de que la sequedad esté presente en los labios, por ello si aún no has empezado, ahora es el momento.
Hay cuatro cosas que puedes hacer para evitar daños por deshidratación:
- Elimina la piel muerta e intenta dejar la superficie lisa. Con la ayuda de un cepillo de dientes de cerdas suaves, pásalo por los labios haciendo círculos con una pasta hecha de azúcar de caña y aceite de oliva. También existen barras exfoliantes pensadas para esta función en concreto.
- Empieza a aplicarte un tratamiento labial de forma regular. Es imprescindible usar un cosmético de hidratación máxima, o aceites naturales como el de almendras, coco, ricino o manteca de Karité, los cuales tienen grandes propiedades reparadoras. Lo dejaremos actuar unos minutos antes de usar el maquillaje habitual. También lo aplicaremos por la noche antes de ir a la cama para darle la oportunidad a la piel de los labios de nutrirse y repararse en profundidad.
- Usaremos para prevenir los daños durante todo el año un protector labial con protección solar.
- Ingiere alimentos que contengan ácido fólico, y vitaminas del grupo B (B2, B6 y B12) como por ejemplo los vegetales de hojas verdes, los cítricos, las patatas y levadura de cerveza. Te sorprenderán los resultados de nutrir la piel desde el interior, los labios saldrán gratamente beneficiados.
Te recomendamos también algunos aspectos a tener en cuenta:
- La costumbre de mojarnos los labios con la lengua o morderlos con frecuencia es perjudicial. La saliva al revés de hidratar, reseca, y no ayuda para nada a evitar la deshidratación.
- No podemos olvidarnos de beber la suficiente cantidad de líquido al día, por lo menos se recomiendan de 8 a 10 vasos de agua al día.
- Utiliza la vaselina con asiduidad, ya sea sola o como ingrediente de la mayoría de protectores labiales.
- No utilices humectantes labiales que contengan mentol, pueden ser irritantes.
- Si nos llegan a sangrar podemos utilizar el gel de aloe vera puro ya que su acción cicatrizante y regeneradora nos ayudará a restablecer la delicada piel de los labios.
- En algunos casos dónde hay un gran daño es necesario consultar a un dermatólogo quien quizás nos recomiende una crema de hidrocortisona, la cual se puede adquirir en farmacias.
- Evita en la medida de lo posible el tabaco el cual agrava esta problemática.