A partir de cierta edad nos empezamos a dar cuenta de que esas arruguitas que tenemos en el rostro cada vez son más visibles y marcadas.

Las arrugas en la piel aparecen por la reducción progresiva de colágeno y otras fibras elásticas cuya función es mantener la tonicidad y la elasticidad de la piel. A medida que el tiempo pasa, este progresivo deterioro provoca cierta laxitud y pérdida de tensión, con lo que aparecen más visibles las irregularidades y surcos en la dermis, llamadas arrugas o líneas de expresión.

Las fibras de las que hablamos modifican su estructura debido a factores internos, biológicamente naturales y otros externos, como puede ser la excesiva exposición solar, con la que si podemos tener especial precaución y protección para minimizar sus efectos de envejecimiento prematuro.

A parte de los rayos solares existen otras causas externas que provocan la aparición prematura de arrugas y, conocerlas, te puede permitir realizar acciones de prevención.

El tabaco, la falta de descanso, la alimentación desequilibrada y la hipertonicidad de la musculatura facial son las causas más destacadas.

En cuanto al tabaco, conocemos de sobra sus efectos adversos hacía la salud en general pero en relación a la piel aún existe cierto desconocimiento. A largo plazo el hábito de fumar produce vasoconstricción periférica que afecta a la correcta vascularización de la piel. Cuando a la dermis no le llega la irrigación sanguínea correctamente, no recibe el oxígeno suficiente por lo que la piel pierde mucha vitalidad, no está suficientemente nutrida y los procesos de renovación del colágeno resultan altamente afectados.

Por la falta de descanso perdemos la oportunidad de regenerar nuestros tejidos de forma natural. Normalmente cuando no se logra descansar lo suficiente se produce un aumento de cortisol, la hormona del estrés, durante el día. Hormona altamente perjudicial para todo el organismo e inhibidora de la producción de colágeno.

La alimentación desequilibrada, la cual sufre mucha gente debido a las prisas y las condiciones con las que nos encontramos en nuestro día a día, así como la falta de ingesta del agua necesaria, no nos permite ingerir los nutrientes básicos y en muchas ocasiones esto perjudica altamente a la hidratación y a la calidad de la dermis. Informarnos de los alimentos antioxidantes e introducirlos en nuestra dieta nos ayudará a proteger a la piel de los radicales libres y a minimizar la visibilidad de las arrugas prematuras.

Por último, la hipertonicidad de los músculos faciales o hiperdinamia, es la forma de nombrar la contracción excesiva de la musculatura facial. Las líneas de expresión son la consecuencia de la ejercitacion continua de esta musculatura altamente dinámica.

Hay personas que tienen una mayor potencia muscular o que gesticulan de forma más continua durante el día, por lo que tendrán mayor predisposición a que les aparezcan las arrugas de expresión.

El conocer las principales causas del envejecimiento facial prematuro nos aporta herramientas para la prevención y para el cuidado de la piel, que nunca debemos olvidar.

En el caso de que queramos actuar de forma directa sobre aquellas lineas de expresión que envejecen nuestro rostro, como son las del contorno de los ojos, las que se forman entre las cejas, las del labio superior, así como para tratar la flacidez, recuperando tonicidad, podemos intervenir eficazmente con la tecnología médica estética más avanzada del momento.

Os recomendamos el tratamiento con Venus Viva, el dispositivo más avanzado de remodelación facial con radiofrecuencia Nanofraccional, la cual reactiva el colágeno y regenera los tejidos consiguiendo un look más joven y fresco.

Sus resultados son excelentes cuando se personaliza el tratamiento y se combinan las técnicas para ajustarse al máximo a las necesidades de la persona, logrando resultados naturales y altamente satisfactorios.

Tras ver el vídeo os recomendamos solicitar información para corregir las arrugas de vuestro rostro, seguro os ayudaremos y juntas alcanzaremos vuestros objetivos.