Con la llegada del verano, la piel sufre mucho más los efectos del sol. Es por eso que nos pasamos el día detrás de las cremas hidratantes, cremas solares… ¿Qué diríais si os dijéramos que hay una manera de cuidar la piel por la noche?

La piel está siempre alerta incluso cuando estamos descansando. De día, la piel está expuesta a muchos factores externos que ponen en marcha los distintos mecanismos que tenemos de defensa. De noche, en cambio, los mecanismos de reparación y desintoxicación se activan para recuperarse de las agresiones sufridas durante el día. Además, es durante este periodo cuando la piel se regenera a una velocidad más rápida, por lo que podemos sacar partido de este proceso aplicando productos que ayuden a renovar la piel y reparar nuestros tejidos.

Por todo esto, es importante limpiar la piel correctamente antes de irnos a dormir y aplicar un buen cosmético para que nos ayude a regenerar las células de la piel. Porqué, aunque hemos dicho que por la noche hace un gran esfuerzo por sí sola, siempre es bienvenido una ayudita extra.

Uno de los infalibles para mantener la salud en nuestra piel es el sueño. Es recomendable tener, al menos, unas 8 horas diarias de sueño. Si, de lo contrario, nos privamos a la hora de dormir, el cuerpo producirá más hormonas del estrés, las que pueden provocar inflamaciones en el cuerpo, descomposición del colágeno y ácido hilaurónico… lo que, en definitiva, nos afectará al brillo, a la flexibilidad, a la hidratación y a la luminosidad de la piel. Es posible, incluso, que aparezcan bolsas en los ojos o arrugas.

En cuanto a los productos que podemos aplicarnos antes de ir a dormir están aquellas que promuevan el proceso de reparación natural de la piel. Eso sí, antes, debemos limpiar correctamente nuestra piel para eliminar residuos medioambientales y cualquier resto de maquillaje que haya podido permanecer. Además, para sacar el máximo partido, es recomendable que se aplique la crema una hora antes de ir a dormir. De esta manera, los principios activos se absorberán mucho mejor.

Hay muchos tipos de productos diferentes que se adecuan a los diferentes tipos de piel. ¡Sólo tienes que encontrar el tuyo!