El rejuvelac es una bebida fácil de hacer y muy económica. Utilizando la fermentación logramos enriquecerla con valiosos probióticos y vitaminas para  nutrir y rejuvenecer nuestro organismo.

También conocida como agua enzimática para rejuvenecer contiene vitaminas B, K y E junto con proteínas y enzimas.

El rejuvelac se obtiene a través de la germinación de semillas variadas como son las de centeno, trigo, alfalfa, quinoa, cebada, avena, trigo sarraceno o chía. Mediante el proceso de fermentación en líquido, preferiblemente agua, logramos que los nutrientes queden intactos a la hora de consumirlos y su asimilación por parte del organismo sea rápida y eficaz.

Además su carga en enzimas es muy elevada por lo que nos aporta una serie de beneficios muy recomendables para mantener nuestro organismo sano y joven.

Considerado un inmejorable probiótico nos ayuda a tratar el estreñimiento limpiando el tracto intestinal, nutriéndolo y conservando su flora bacteriana beneficiosa. Con su ácido láctico el rejuvelac es útil en la destrucción de bacterias intestinales nocivas. Podríamos asegurar que esta bebida probiótica es un tonificador y agente beneficioso para lograr que el colon funcione de forma correcta, mejorando así los procesos de desintoxicación y promoviendo la salud.

También:

  • Nos ayuda en las digestiones por sus enzimas, evitando las flatulencias
  • Nos aporta bacterias beneficiosas como los lactobacilos bífidos, cuyo rendimiento nos enriquece con ácido láctico y vitaminas del grupo B
  • Nos activa el sistema inmunológico
  • Es un agente contra la inflamación en casos de gastritis y colitis

 

Pero, ¿ cómo se prepara el rejuvelac o agua enzimática?

Es muy sencillo, te indicamos a continuación cuales son los ingredientes y utensilios necesarios para prepararla en casa:

  • 55 gramos de la semilla escogida
  • Agua suficiente para activar las semillas poniéndolas en remojo
  • 1 litro de agua pura
  • Un colador
  • 2 tarros de cristal de boca ancha o los especiales para germinados que permiten la correcta ventilación y drenaje del agua.
  • 1 jarra de vidrio
  • 1 tela de gasa para cubrir el tarro

 ELABORACIÓN

  • Lavamos muy bien las semillas que hayamos escogido ( mejor si son semillas de procedencia ecológica) Dejamos en remojo con agua durante 12-15 horas en el tarro de vidrio con la gasa cubriendo la abertura para lograr una correcta ventilación. De esta manera activamos las semillas.
  • Escurrimos el agua sin enjuagar y cubrimos de nuevo el frasco con la gasa. Dejamos germinar dos o tres días en un lugar oscuro y fresco. Pasado este tiempo añadimos agua limpia, en proporción de tres veces la cantidad de semillas germinadas. Cubrimos de nuevo el frasco con la gasa y lo dejamos en reposo 24 horas más a temperatura ambiente.
  • Para terminar usa el colador y pon en la jarra toda el agua enzimática del tarro, ya tienes preparado el Rejuvelac!!

Se puede guardar en la nevera para tomar cuando desees, para añadirlo en zumos o diversas recetas o incluso en mascarillas. Si añadimos agua de nuevo a las semillas que han quedado en el frasco, a las 24 horas tendremos más rejuvelac.

Aunque hay que tener muy presente que si el sabor de la bebida es muy ácido y tiene un olor desagradable es mejor desechar las semillas y el líquido y empezar de nuevo con el procedimiento.

Te ofrecemos también una receta sencilla que puedes preparar como mascarilla con tu rejuvelac para nutrir la piel.

Un poco de perejil finamente picado
2 bananos maduros
1 cucharada de rejuvelac
1 cucharada de iogurt natural

Preparación: Mezclamos todos los ingredientes, colocamos en el rostro durante 20 minutos y retiramos con agua tibia. Realizar la aplicación 2 veces por semana.