Con la llegada del otoño, llegan el frío, los abrigos…y los resfriados. Solemos decirnos que ya pasarán o nos tomamos un poco de antibiótico que nos sobró de la última vez. Pero… ¿qué pasaría si llevamos años haciendo lo incorrecto?

Según el Centro de Investigación sobre Fitoterapia (INFITO), más de la mitad de la población ha usado antibióticos para curar un resfriado o la gripe, a pesar que los provocan los virus y no las bacterias. ¡Exacto! Es correcto usar un antibiótico para erradicar bacterias del cuerpo que nos causan enfermedades, pero nunca para erradicar virus.

¿Qué debemos tomar, pues? Hay miles de opciones que podemos tener en cuenta, aunque quizás sean los productos que podemos encontrar en herbolarios los que más salida tienen. Muchos ya se decantan por productos naturales con efectos antivirales que se puedan encontrar sin prescripción médica en este tipo de tiendas.
El própolis, por ejemplo. Se trata de una sustancia que obtienen las abejas de las plantas y que usan para mantener su colmena desinfectada y libre de bacterias. Se encuentra en pequeñas cantidades entre la miel, por lo que es muy difícil su recolección. Aunque vale la pena ya que es considerado un antibiótico natural por todas las propiedades que posee.
Y no sólo de ahora, ya que su uso es conocido des de muchos años atrás. Los egipcios lo usaban como medicina; los griegos como remedio para las infecciones; los incas para bajar la fiebre y los franceses para tratar llagas.

El própolis contiene más de cincuenta principios activos que son muy beneficiosos para la salud. Es, por ejemplo, antibacteriano, antiinflamatorio, cicatrizante y ligeramente analgésico; tiene propiedades anti fúngicas y antiparasitarias, actúa como inmunoestimulante y mejora la permeabilidad capilar. También contiene propiedades antioxidantes y disminuye los ácidos gástricos.
Por todo ello, no es de extrañar que se trate de un producto bastante caro, tanto por la cantidad de ventajas que nos ofrece como por la dificultad a la hora de recolectarlo. Aunque no desesperéis, ya que se puede encontrar fácilmente en farmacias y herbolarios como cápsulas, comprimidos, jarabes, caramelos…

Ya sabéis… si queréis prevenir o curar un resfriado, antes de optar por un antibiótico, dadle una oportunidad a estos productos naturales.