Cuando nos damos cuenta de que tenemos varices es imprescindible acudir a los especialistas en Angiología y Cirugía Vascular, quienes están capacitados para abordar de forma correcta el tratamiento de esta dolencia.
Normalmente las varices son la primera expresión visible de una alteración en la circulación venosa. Según su gravedad puede tener una sintomatología distinta, pudiendo llegar a ser una afección crónica y grave. En España se calcula que aproximadamente 2.500.000 personas tienen varices y reciben tratamientos quirúrgicos para solventar su problemática.
La circulación venosa se puede ver alterada cuando el retorno de la sangre hacia el corazón no se está realizando de forma eficaz debido a una alteración de las válvulas venosas, que al perder su funcionalidad, provocan una acumulación de sangre en la vena y por consiguiente una dilatación excesiva. Normalmente se desarrollan en los miembros inferiores pudiéndose dar también en otras zonas corporales.
Siendo múltiples los factores de riesgo para llegar a padecer esta dolencia, tales como:
La obesidad, el sedentarismo, los hábitos tóxicos como el tabaco, la hipercolesterolemia, los anticonceptivos, los antecedentes familiares….
Son también numerosas las medidas preventivas que los especialistas recomiendan para favorecer la no aparición o retrasar la evolución de las varices y sus complicaciones.
Realmente fáciles de llevar a cabo por cualquier persona, las medidas de las que hablamos consisten en mantener la piel limpia e hidratada, evitar una exposición prolongada ante altas temperaturas, ya sea durante la exposición solar, los largos baños con agua caliente, las saunas o baños de vapor, etc…Favoreciendo en cambio la vasoconstricción con el frío, pudiendo realizar duchas de agua fría desde los pies hacía los muslos, así como los masajes que incrementarán el retorno venoso gracias al uso de geles o cremas específicas para esta afectación.
En cuanto a las recomendaciones que se refieren a la alimentación quisiéramos destacar el poder alimentarse de forma saludable, controlando el exceso de peso como posible desencadenante, el enriquecer nuestra dieta con fibra natural proveniente de los frutos secos, las legumbres, los cereales integrales, para evitar el estreñimiento.
Factor clave también el beber el agua suficiente para aportar fluidez a la sangre, el consumir alimentos antioxidantes y buscar el potasio que nos aportan alimentos como el plátano o la levadura de cerveza, entre otras muchas opciones que contempla una óptima nutrición de nuestro cuerpo.
Muchas de las personas que sufren con las varices son personas que por su trabajo deben pasar muchas horas de pie o también en el lado opuesto hay quienes el sedentarismo se ha instalado en sus vidas. Se aconseja que estos dos extremos sean compensados realizando un mínimo de 30 minutos al día de ejercicios moderados como el caminar, subir escaleras, nadar… Si estas en el caso de que debes estar de pie muchas horas en tu jornada sería recomendable realizar en periodos frecuentes, en la medida de lo posible, ejercicios que activen la musculatura de las piernas, caminar de puntillas, sobre los talones, realizar pequeñas flexiones y giros, estimular los dedos de los pies, etc.. También es muy adecuado en los momentos de descanso, mantener durante un rato los pies elevados para favorecer el retorno venoso.
Existen diferentes grados de afectación de las varices y por ello podemos decir que en un número determinado de casos se podrán controlar y resultaran ser nada más un problema estético, sobre el cual se ha trabajado mucho para poder ofrecer los mejores tratamientos llegando a eliminar por completo su manifestación sin tener que pasar por el quirófano.
Tratamientos con microespuma esclerosante, láser/ fotoesclerosis, o radiofrecuencia, son algunas de las opciones que podemos encontrar para solventar el problema estético de las varices. Conseguir unas piernas bonitas es posible, siguiendo las recomendaciones de prevención y asesorándonos por los mejores profesionales que nos orientarán en cuál es el mejor tratamiento ajustado a nuestras necesidades.