Todas sabemos que el verano y nuestras actividades durante esta época del año, afectan no sólo a nuestra piel sino también a nuestro pelo.
El cloro de las piscinas, el sol, la sal del mar… Agentes externos que debilitan y decoloran las fibras capilares.
En concreto el sol daña la melanina y la queratina, decolorando el pelo y resecándolo con lo que se puede volver frágil, quebradizo y sin brillo.

Los expertos conocen muy bien como proteger el pelo en verano y si sigues leyendo te vamos a dar sus mejores consejos.

A parte de usar los sprays protectores para el sol específicos para el pelo, los cuales también nos ayudan a combatir los efectos del cloro y la sal, hay otros productos y hábitos que a veces no realizamos y que son grandes aliados para tener un pelo sano, fuerte y brillante en verano.

Empieza ya este verano a prestarle una atención especial a la cabellera que tanto tiempo llevas cuidando.
Hidrátala en profundidad con productos que te aporten también nutrición. Encuentra aquellos que tengan el colágeno en su composición ya que será un gran refuerzo para fortalecer y ayudar en el crecimiento.

Descubre y alíate con los aceites capilares

Ya hace años que llegaron con fuerza el aceite de coco, el de oliva y el de argán. Sus cualidades reparadoras e hidratantes son incuestionables y son muchas las personas que ya han incluido a estos aceites en sus rutinas diarias de belleza, incluso substituyendo a las tan apreciadas mascarillas capilares.

Pero hay mucho más por descubrir ya que existen gran variedad de aceites, y formas distintas de aplicación. Cuando usamos el aceite capilar sabemos qué estamos protegiendo, reparando, nutriendo e hidratando de forma intensiva y natural. 

Quizá hay personas que no han probado aún los aceites capilares por miedo al efecto graso, pero actualmente este ya no es un problema. Numerosas marcas pioneras en cosmética capilar han trabajado con los mejores aceites puros, creando fórmulas muy ligeras, preocupándose por el acabado y ofreciendo resultados profesionales.

En un primer momento se usaban los aceites como recurso de choque en la reparación de melenas muy estropeadas, teniéndose que eliminar con agua tras su aplicación. Hoy en día podemos disfrutar de múltiples variedades y usarlos de distintas maneras, como aliados para el peinado, embellecedores, para sellar las puntas e incluso para tapar las canas.

Te descubrimos a continuación las variedades más comunes, que puedes encontrar en su formato natural o como componentes prioritarios de algunas fórmulas capilares. Te explicamos sus particularidades y los beneficios que aportarán a tu pelo este verano:

Aceite de flor de magnolia: Nos aportará suavidad, frescura y potenciará el brillo natural del pelo.

Aceite de pepita de uva: Altamente estudiado por sus infinitas cualidades destaca por su poder antioxidante y reparador. Usado con regularidad nos ofrece protección contra la oxidación, los daños solares y el envejecimiento capilar.

Aceite de linaza: Especialmente adecuado para aplicar antes de usar el calor en nuestro pelo. Nos dará suavidad y brillo.

Aceite de Monoï: Genial para aportar un toque a nuestro peinado, eliminando el frizz y ofreciéndonos brillo e hidratación.

Aceite de jojoba: Tiene la capacidad de sellar los folículos pilosos, lograr el equilibrio de la producción sebácea y potenciar un brillo saludable.

Aceite de almendras: Por su alto contenido en vitamina E, ácidos grasos monoinsaturados, proteínas de alto valor, potasio y zinc, además de minerales y vitaminas, es uno de los más completos en su acción en nuestro pelo. Debería ser el escogido por las cabelleras más maltratadas y de apariencia reseca y quebradiza.
Aplicado con regularidad y dejándolo actuar lo suficiente podrá vigorizar las raíces, hidratar y suavizar.

La forma de aplicación varía según el aceite que escojamos ya que cada uno tiene su propio manual, que es diferente a los otros en función de su objetivo principal.

Lo mejor es seguir las instrucciones del producto escogido y si se necesita reparar en profundidad, hidratar y nutrir, se puede aplicar en seco antes del lavado, dejándolo actuar como si fuera una mascarilla habitual.

En todos los tipos de cabello podemos disfrutar de sus grandes beneficios, aumentando la suavidad, el brillo y facilitándonos el peinado y, en definitiva, realzando la belleza de nuestra cabellera.